martes, 9 de enero de 2007

¿Esnobismo? ¿Tilinguería? ¿Imbecilidad?

Entro a un shopping (ya la palabra me rechina) y me abruman los carteles pegados en las vidrieras: sale, 30% 0ff. Un aviso en la televisión promociona aparatos de aire acondicionado y servicios de posventa all inclusive. Algunos periodistas de economía parece que no pueden informar del tema sin usar palabras como marketing, merchandise o cash. El respeto por sus lectores que no sepan inglés, bien gracias...
Ya va siendo hora de que el Ministerio de Educación y Cultura, o la autoridad que corresponda, nos recuerde que nuestro idioma oficial es el español o castellano. Un idioma riquísimo, que sólo cede terreno en temas científicos y tecnológicos por la simple razón que los angloparlantes investigan, descubren e inventan más que los hispanohablantes. Para todo lo restante, el español se basta, se sobra y saca amplia ventaja. Sobre todo ante el inglés, un idioma verdaderamente pobre.
No se trata de conculcar el derecho a la libre expresión (que cada cual hable o escriba como quiera), pero sí de defender institucionalmente lo nuestro, nuestra cultura. Tampoco de luchar contra la particular versión del castellano ripolatense, como ridículamente pretendieron las dictaduras de ambas orillas. Pero las autoridades deberían negociar el problema con agencias de publicidad y medios de comunicación, recordándoles su responsabilidad en la defensa de nuestro idioma.
Es aceptable, obviamente, que los comercios de un país turístico ofrezcan las mercaderías en sus vidrieras en varios idiomas. Aunque, antes que nada y con mayor destaque, en español.
A los esnobistas, tilingos e imbéciles que en sus escritos se sienten obligados a intercalar voces extranjeras, les propongo un ejercicio: que comprueben, en un buen diccionario inglés, si realmente las palabras que usan tienen el sentido que pretenden darle.
Hasta la próxima, good-bye.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Felicitaciones por tu blog. Está re cool. Especialmente este segundo post. Genial, man. No coments.

Lo que no entiendo es por qué en el primer artículo escribiste:
"Este blog pretende ser una herramienta para romper esquemas".

¿No deberías haber escrito bitácora, diario personal electrónico, o simplemente página personal?.

De todas formas, muy bueno, seguí así.

Carlos López Matteo dijo...

Charaboncito:

Tenés razón. Gracias por tu comentario.